J se va a una manifa a alguna parte y yo me dirijo hacia el sur. Los dos usamos el autobús del colegio, el que lleva a los niños del pueblo a la escuela que cada uno atiende. El profesor de inglés me pide que intente conseguir que mi embajada les envíe libros en inglés, para que los niños puedan practicar la lectura. Imagino que esto tendrá que esperar hasta que llegue a casa…