Todos los viernes hay una manifestación contra el muro en Bi’Lin. El muro en Bi’Lin es en realidad una valla metálica del estilo que vi en Yayyous, pero se le llama muro también porque separa igual.
Más activistas israelíes – e internacionales – llegan durante la mañana y la calle está muy concurrida, incluso antes de que los palestinos salgan de la mezquita. J y A son algunos de estos internacionales; nos ponemos al día de lo que hemos estado haciendo desde la última vez que nos vimos.
Bi’Lin V. Gas, balas, piedras. Gas
Bi’Lin IV. Israelíes contra el Muro
Mañana es la manifestación semanal en Bi’Lin. Las manifestaciones no son nunca aburridas, no consisten en solamente en caminar de A a B. Probablemente caminarán también, pero se nota que hacen accesorios creativos para cada manifestación. Algunas veces son pancartas, algunas veces algo más.
Bi’Lin III
Hoy salgo a dar un paseo con W y nos perdemos, bonitamente. Nos paramos en una esquina tratando de decidir la calle que cogemos y entonces alguien nos llama desde un portal.
Bi’Lin II. Ciudad – asentamiento
A primera vista el asentamiento cerca de Bi’Lin no es reconocible como tal. Parece más una ciudad normal, con sus enormes bloques de pisos, todos de un blanco inmaculado, pero no como los otros asentamientos, más pequeños, con sus pequeñas casas con sus tejados rojos. Esto ha pasado más desapercibido a mis ojos porque se parece más a una horrible mega ciudad del Oeste de Europa que a una bonita villa de California.
Judíos, musulmanes y cristianos
M. me lleva al pueblo de al lado. Me cuenta un episodio curioso de este pueblo: la iglesia estaba muy vieja y necesitaba reparaciones, y los musulmanes insistieron en pagar la mitad del coste. Yo observo que toda la gente viste igual que en el resto de Palestina y le pregunto dónde están los cristianos. «¿Qué quieres decir?» «Los cristianos. Las mujeres que no necesitan cubrirse la cabeza.» «Ah. No, la cristianas se visten igual.» «Entonces lo de cubrirse la cabeza no es algo religioso, sino una costumbre cultural.» Y sigo sobre lo sorprendida que estoy por el hecho de que cristianos y musulmanes convivan en el mismo pueblo. «Bueno, sí, y judíos también.» «Te refieres a algún asentamiento.» «No, no en asentamientos. En pueblos también.»¿Judíos en los territorios ocupados?» «Sí.» «Pero, ¿no les expulsaron a todos, los romanos?» «Algunos se las arreglaron para quedarse, nunca se fueron. Pero los israelíes les tratan igual que al resto de palestinos. Para ellos sólo son palestinos.»
Bi’Lin
Cada noche en Bi’Lin he rezado para que no tengamos que salir – es decir, para que el ejército israelí no invada el pueblo por la noche para poder hacer los arrestos que no puede hacer durante las manifestaciones a causa de la presencia internacional.
Yanoun a Ramala
J se va a una manifa a alguna parte y yo me dirijo hacia el sur. Los dos usamos el autobús del colegio, el que lleva a los niños del pueblo a la escuela que cada uno atiende. El profesor de inglés me pide que intente conseguir que mi embajada les envíe libros en inglés, para que los niños puedan practicar la lectura. Imagino que esto tendrá que esperar hasta que llegue a casa…
Yanoun IV. Sola
Cuando los habitantes decidieron abandonar Yanoun después de la campaña de terror llevada a cabo por los colonos locales, se les «convenció» para que volvieran. Convinieron, sólo a condición de que se les garantizara que siempre habría aquí por lo menos tres internacionales estacionados en todo momento. La organización llamada CCPT adquirió el compromiso de mantener por lo menos a tres personas aquí siempre.
Hoy incumplimos esta norma
Yanoun II. Escuela
J y D se quedan en casa mientras que A y yo vamos a la escuela a las 9. Al parecer hay una clase de inglés a esa hora. Resulta que no, así que me las apaño con una de árabe. Esta es la clase de los mayores; el año que viene tendrán que ir todos los días a Aqraba para ir a la escuela secundaria.
Yanoun I
Mientras O. nos lleva en su coche a la ciudad más cercana a Yanoun, nos habla del último incidente que ha pasado allí. Un colono hirió a un palestino, que por suerte está vivo, recuperándose en el hospital.