Otro día que me paso la noche entera en vela y veo amanecer. Esto de
tener el ordenador justo frente a la ventana tiene sus ventajas, y el
hecho de que mi habitación de al Este también. En general el amanecer
es mucho más bonito que el anochecer, más fresco, como más limpio. No
hay tonos rojos tan oscuros pero el rosita con que saluda el día
tampoco le tiene envidia.
Lo más bonito de todo es que no son
aún las 7 de la mañana, y se nota que va amaneciendo antes y
anocheciendo más tarde, y ya solo eso nos pone contentos, aparte del
calorcito. Aunque lleguen las 9 de la noche y se ponga a nevar.